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Argentina recibirá en mayo más de 4 millones de dosis de la vacuna de Astrazeneca

Las dosis llegarán en cuatro embarques previstos para los días 17, 19, 24 y 31 de mayo. Para julio, se espera haber recibido en el país un total de 10 millones de dosis de AstraZeneca. El objetivo es terminar de vacunar, antes de que llegue el invierno, a todos los mayores de 60 años y a los menores de esa edad con factores de riesgo.


La ministra de Salud, Carla Vizzotti, les transmitió a sus pares de todo el país que el laboratorio AstraZeneca informó que, antes de fin de mes, llegarán al país 3.960.000 dosis de la vacuna de Oxford/AstraZeneca, cuyo componente activo se fabricó en la Argentina. En principio, el arribo está previsto en cuatro tramos: los días 17, 19, 24 y 31 de mayo. Todo indica que esa partida es la primera de una importante serie de envíos autorizados después de que se superaran los estrictos controles de calidad que se desarrollaron en Cambridge (Inglaterra), México y Estados Unidos. La Argentina recibirá, en total, 22 millones de dosis, por lo que se puede presumir que en junio llegarán, como mínimo, otros tres millones de vacunas, lo que debería permitir la vacunación, antes de que llegue el invierno, de todos los mayores de 60 años y todos los menores de esa edad con factores de riesgo. Eso incluye, por ejemplo, a personas de 30 años con determinados tipos de diabetes o asma. Fuentes cercanas a AstraZeneca le dijeron a este diario que la lógica indica que de esa vacuna, como mínimo, vendrán 10 millones de dosis entre mayo, junio y julio.

Página/12 adelantó ayer en exclusiva que la cantidad de dosis que se embarcarían en México este mes podrían ser más de los dos millones que el presidente mexicano ,Andrés Manuel López Obrador, le prometió a Alberto Fernández. Sucede que, desde la Argentina, el productor del elemento activo de la vacuna, el laboratorio mAbxience de Hugo Sigman, ya envió 45 millones de dosis para su terminación en el laboratorio Liomont de México. De manera que la disponibilidad debía ser importante tras el tortuoso proceso de control de calidad. La venida de los 4 millones de dosis fue confirmada por las autoridades de AstraZeneca ayer por la mañana.

Desde el principio de la pandemia, el gobierno nacional, a través del Ministerio de Salud, primero a cargo de Ginés González García y luego de Carla Vizzotti, acompañados por la asesora presidencial Cecilia Nicolini, tiraron las redes en todas las direcciones para conseguir vacunas, pero jugaron sus principales cartas en dos estrategias:

* Se apostó a la vacuna del Instituto Gamaleya, de Rusia, cuando ningún país la había autorizado y la oposición denunciaba, en alineamiento tradicional con Estados Unidos, que se quería envenenar a los argentinos. La jugada fue un acierto porque hoy la Sputnik V tiene una enorme reputación y es requerida por buena parte de los países.

* La otra apuesta fue a la fabricación de la parte esencial de la vacuna en la Argentina. Se concretó un contrato en noviembre de 2020 entre el grupo Insud, de Sigman, el laboratorio AstraZeneca, con sede en Cambridge, y el laboratorio Liomont de México, con financiamiento del millonario Carlos Slim. El acuerdo incluyó dos ingredientes no menores. En primer lugar, que se trata de la vacuna más barata del mundo, cuatro dólares, comparado con los más de 20 dólares de algunas de las vacunas chinas. En segundo lugar, que la producción se distribuiría en toda América Latina.

Esta última jugada es la que ahora está dando frutos, aunque en forma tardía, porque -como siempre informó este diario-, las dosis estaban retenidas, primero por un atraso en el laboratorio mexicano debido a la falta de filtros norteamericanos, y luego por un triple control de calidad que se realizó a partir de muestras y cultivos que tardaron mucho. La versión más fidedigna es que Liomont tuvo serias dificultades para pasar los controles de calidad por problemas en su laboratorio. Y algo similar ocurrió con un laboratorio de AstraZeneca en Estados Unidos. Las primeras dosis debían llegar a fines de marzo y son las que están por enviar ahora, de manera que hubo una demora de dos meses en un dramático contexto de pandemia.

“Esto cambiará el curso de la segunda ola de la epidemia --dijo ayer Vizzotti ante los demás ministros de Salud del país--. Sin dudas es el inicio de una nueva etapa luego de todo el esfuerzo que hizo el gobierno nacional a través de distintas gestiones para conseguir las vacunas y poder seguir aplicando tanto primeras dosis como completar esquemas”, agregó la ministra.

Con esa novedad, la Argentina recibirá las siguientes partidas en lo que queda de este mes:

* Ya está rumbo a Moscú el décimoquinto vuelo de Aerolíneas Argentinas. El Airbus llegará mañana a la mañana a Ezeiza y podría traer tanto dosis 1 como dosis 2.

* Está la perspectiva de más vuelos a la capital rusa dado que el Instituto Gamaleya y el Fondo Ruso de Inversión Directa (DRIF) están escalando la producción.

* El fondo Covax de la OMS ya informó que el 21 de mayo llegarán 861 mil dosis de la vacuna Oxford/AstraZeneca seguramente fabricadas en Corea del Sur.

* Entre el 17 y el 31 de mayo vienen los casi cuatro millones de Oxford/AstraZeneca.

Si se hace una suma de todos los embarques en vista, la Argentina podría redondear unos 18 millones de vacunas antes de fin de mes y, por supuesto, el desafío pasará a la cancha de la vacunación. “Si se cumple el cronograma, en poco tiempo se podrá vacunar a la población-objetivo, priorizada en esta etapa, ya que las jurisdicciones tienen la capacidad para hacerlo”, redondeó Vizzotti.

El acuerdo AstraZeneca-Argentina-México, y los privados que intervienen, tiene un elemento estratégico de magnitud: traslada la producción a territorio propio y amortigua la desesperada espera de vuelos desde países remotos. La cuestión es de envergadura, además, porque todo indica que habrá que aplicar nuevas dosis: los estudios todavía no establecen la duración en el tiempo de la eficacia de los anticuerpos. Pfizer, por ejemplo, adelanta que la protección oscila entre nueve meses y un año. Por lo tanto, seguramente habrá que reiterar la vacunación. Pero en ese caso habrá al menos un aparato de producción propia.

Como es obvio, la oposición argentina, que cambia su discurso paso a paso, armará uno nuevo ante la evidencia de la llegada de cantidades importantes de vacunas.

* Ya ha dicho que el Gobierno pretendía envenenar a los ciudadanos con la Sputnik V.

* Después de la confirmación de la eficacia de la Sputnik V en la revista científica The Lancet, pasaron a decir que no se estaba trayendo la cantidad necesaria.

* Luego reclamaron por la dosis 2 del veneno. Con un dato curioso: el líder de Juntos por el Cambio, Mauricio Macri se aplicó en Estados Unidos la monodosis de Johnson & Johnson, que según la entidad rectora norteamericana, la CDC, tiene una efectividad del 61por ciento. En paralelo, el Instituto Gamaleya sostuvo que la primera dosis de Sputnik V registra una efectividad del 74 por ciento.

* Hoy en día insisten en que sólo está vacunado el 3 por ciento de la población, cuando es público y notorio que muchísimos países optaron por privilegiar la primera dosis y no computar la inmunización en base a las dos dosis.

Ahora cada distrito deberá preparar su sistema de vacunación para incrementar el ritmo. Desde el 24 de diciembre, en cuatro meses y medio, se vacunaron 11 millones de personas. Ahora habrá que vacunar casi 6 millones en menos de un mes. Fuentes de los ministerios de Salud bonaerense y de CABA dijeron a este diario que se puede pensar en inmunizar antes de la llegada del invierno a personas de 30 años con enfermedades previas y a todo el personal de la educación, la seguridad o el transporte. Estará entonces inmunizada toda la franja de mayores riesgos. Mientras, lo esencial será cumplir con las restricciones, seguir bajando la curva de contagios para que después impacte la inmunización. En el Reino Unido, tras la intensa aplicacion de dosis 1, los fallecimientos pasaron de 1200 por día a algo más de diez. Ayer, los fallecidos fueron cuatro.
















Fuente: Página 12

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