El gobierno nacional tiene claro que el único sector fuerte y de real oposición a sus políticas nefastas es el Movimiento Obrero Organizado. Para el gobierno, el problema es el costo laboral en nuestro país y para eso es necesario debilitar a los sindicatos. Hay que destruir los “malditos” convenios colectivos de trabajo creados por el Peronismo hace 70 años. El Fondo Monetario Internacional ordena moderar los salarios como única manera de contener la inflación. Menos dinero en los bolsillos del pueblo, más en la caja fuerte de las grandes empresas. Menos consumo, menos trabajo. El Ministerio de la Producción dice que la única opción para salvar algo de la industria textil es que la Cámara Empresaria y el sindicato firmen un acuerdo de precarización laboral. El gobierno anula por decreto la paritaria docente y alienta la desafiliación de los trabajadores del Suteba. Los empresario del sector camionero exigen que el gremio resigne la mitad de la asign